La justicia tumba la decisión de Carmena de cargarse la calle ‘Caídos de la División Azul’
El Juzgado Contencioso-Administrativo número 8 de Madrid ha anulado el cambio de nombre de la calle «Caídos de la División Azul» al entender que su modificación por parte del Ayuntamiento de Madrid, en cumplimiento de la ley de memoria histórica, no se ajusta a derecho.
La sentencia, fechada el pasado 6 de abril de 2018 a la que ha tenido acceso OKDIARIO, argumenta que la División Azul se formó en 1941, dos años después de finalizar la Guerra Civil y que por tanto «no entra» en «el periodo de exaltación de la sublevación militar (1936), ni de la guerra civil», que es al que se refiere la normativa vigente.
El Ayuntamiento ha anunciado que va a recurrir porque los valores de esta división militar «no se corresponde con los valores ciudadanos y democráticos del siglo XXI», según trasladan fuentes municipales a las agencias de noticias.
«Es anterior a la Guerra Civil»
El juzgado madrileño da así la razón a José Luis Marín, que interpuso el recurso en representación del Colectivo de Familiares Caídos en Rusia. La sentencia rechaza que «Caídos de la División Azul» sea parte de la ley de memoria histórica porque aunque se creó en el periodo de la dictadura «su actuación se desarrolla fuera de nuestras fronteras, y no fueron de exaltación a la dictadura».
La jueza Ana Monreal niega así que, como argumenta el Ayuntamiento, que dicha calle suponga «una exaltación colectiva que contribuyó manifiestamente al mantenimiento y adhesión de la Dictadura, resultando que los caídos de la División Azul estuvieron singularmente vinculados a régimen franquista de manera activa y significativa».
«No exaltaron la rebelión militar»
Para la magistrada, los caídos de la División Azul «no realizaron acciones o conductas exaltando la rebelión militar, ni la guerra civil, ni participaron en la represión de la guerra civil, ni mucho menos fueron instrumento o soporte de sostenimiento del sistema dictatorial implantado por Franco».
En declaraciones a Efe el presidente de este colectivo, José Luis Marín, ha asegurado que la sentencia es «demoledora» y ha pedido la dimisión de Paca Sauquillo, la presidenta del comisionado de memoria histórica que propuso el listado de calles, y de todos los miembros de este órgano por «ignorantes y sectarios».
El pasado 27 de marzo tres miembros del comisionado, incluida la propia Paca Sauquillo, tuvieron que declarar ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 23 de Madrid por la denuncia de la Fundación Francisco Franco contra el cambio de nombre de 52 calles de la capital, cuya aplicación se ha suspendido de forma cautelar.
También han sido recurridas individualmente la retirada de las calles General Millán Astray, paseo de Muñoz de Grandes, Crucero Baleares y General Asensio Cabanillas.
«Se busca el enfrentamiento», según el PP
El portavoz del PP en el Ayuntamiento José Luis Martinez-Almeida ha expresado sobre esta decisión que es «nuevo varapalo judicial a Manuela Carmena y su equipo de Gobierno». «Los antiguos compañeros de la alcaldesa han tenido que volver a desmontar una de las tropelías que pretendía Carmena», señala el edil popular.
Almeida considera que «se ha acordado la estimación del recurso contra el cambio de denominación de esta calle como consecuencia de una aplicación de la Ley Memoria Histórica que busca el enfrentamiento y no la reconciliación, que se hace de una visión sesgada y sectaria». El portavoz popular añade que el recurso anunciado por el Ayuntamiento es «incompatible con los valores de la ciudadanía y la democracia en el siglo XXI y quien lo es este equipo de gobierno».